A menudo se relaciona la construcción industrializada y elementos utilizados en ella como los encofrados de aluminio, con proyectos constructivos de vivienda residencial de magnitud horizontal, cuando algunos referentes mundiales de la construcción vertical o en altura se han llevado a cabo con la utilización de equipos o moldes de encofrado de aluminio, como son los caos de la Torre Cayán de Dubái o la Torre Shangái en China, la segunda más alta del mundo después del Burj Khalifa de Dubai que ostenta la altura máxima con 828 metros, hablamos casi de un kilómetro, ahí queda eso.
La Torre Shanghái está organizada en base a nueve edificios cilíndricos apilados uno encima del otro. La capa interior de la fachada de doble piel encierra los edificios apilados, mientras que la fachada exterior genera la envolvente del edificio, que gira en 120 grados mientras se levanta y le da a la Torre su apariencia curva. Los espacios entre las dos capas de la fachada crean nueve jardines elevados. Al igual que las plazas cívicas de las ciudades tradicionales, estos jardines permiten la interacción y la reunión de la comunidad, incluyendo restaurantes, cafés y tiendas, a lo largo de un paisaje exuberante. A través de estos jardines, la torre es, literalmente, envuelta en espacios públicos.
La sostenibilidad está en el centro del diseño. La forma cónica de la fachada, la textura y la asimetría de trabajo en colaboración -para reducir las cargas de viento sobre el edificio en un 24%-, ofrecen un ahorraron de 58 millones de dólares en materiales de construcción en general. Sus fachadas vidriadas interiores y exteriores admiten el máximo de la luz natural posible, lo que reduce la necesidad de luz eléctrica. La superficie exterior de la torre también aísla el edificio, reduciendo el consumo de energía para calefacción y refrigeración. El parapeto en espiral de la torre recoge agua de lluvia, que se utiliza para los sistemas de calefacción y aire acondicionado.
Una construcción excepcional en la que se tuvieron en cuenta los principios de sostenibilidad en su concepto constructivo. Como no podía ser de otra forma, los moldes de encofrado de aluminio fueron un factor fundamental en el tiempo y costes de ejecución del proyecto, además de ser el aluminio, como es conocido, el metal más reciclable y reutilizable, siguiendo los principios conceptuales del proyecto.
Pese a parecer un proyecto faraónico, el plazo de ejecución se realizo en un plazo óptimo de tiempo de 7 años, y en eso también intervinieron los ágiles equipos de encofrado de aluminio. En el vídeo que os dejamos a continuación podréis ver el timelapse de cuatro años de construcción de la Torre Shanghái, increíble, pero cierto.
El encofrado de aluminio, siendo un nuevo tipo de material de construcción, fue inventado en el año 1962. Después de más de 50 años de desarrollo, se ha utilizado ampliamente en los Estados Unidos, Canadá, Brasil, Colombia, Europa, China, Hong Kong, Macao, India, Malasia, Corea del Sur y Vietnam. Sin embargo, la aplicación de encofrado de aluminio es relativamente nueva en nuestro país. El encofrado de aluminio tiene muchas ventajas en comparación con otros encofrados.
Se puede utilizar repetidamente con bajo costo de uso promedio con una construcción conveniente y eficaz.
El montaje de encofrado de aluminio es simple y productivo, el peso promedio es de 16-20 kg/m2. Se puede completar el montaje de forma manual sin ayuda de máquinas (Normalmente, los trabajadores de la construcción sólo necesitan una llave o un pequeño martillo para montar o desmontar). Un trabajador de instalación cualificado puede instalar 20-30 metros cuadrados por día (compárese con los encofrados de madera, los encofrados de aluminio no requieren técnicos cualificados, una simple formación a los trabajadores de la construcción antes de la instalación resulta suficiente).
Ahorro en el tiempo de construcción: el encofrado de aluminio es un sistema rápido de montaje y desmontado que acorta el período de construcción y ahorrar el costo de administración. Un conjunto de encofrado puede construir un piso cada cuatro días bajo un sistema de construcción normalizada.
Un referente de la construcción en el que se utilizó el encofrado de aluminio
Aplicación general: el encofrado de aluminio se puede aplicar positivamente en la construcción de muro, pared, suelo horizontal, columnas, vigas, escaleras, marcos de las ventanas, placas flotantes etc.
Alto valor de recuperación: el valor de recuperación del sistema de encofrado de aluminio es muy alto cuando ya se deseche para su reciclado.
Lean construction de principio a fin: Todas las piezas del encofrado de aluminio son reutilizables, y no hay basura ni desperdicios en el lugar después de que el encofrado se haya retirado, asegurando un entorno de construcción seguro, limpio y ordenado.
Flexibilidad: el sistema de encofrado de aluminio aporta diferentes tamaños estándar y es muy flexible de aplicar de acuerdo con los requisitos de los respectivos proyectos.
Sólo el 10-15% de placas no estándar se pueden incorporar cuando el encofrado se vuelva a utilizar para otro nuevo proyecto reduciendo con ello el coste de forma considerable.
Reducción de emisiones de carbono: muchos países desarrollados ya han estipulado que no se puede aplicar encofrado de madera en los proyectos de construcción.
Estabilidad: todas las piezas del encofrado de aluminio está compuesto por placas o formaletas. Una vez que el sistema está montado, se formará un marco completo con muy buena capacidad de estabilidad y de capacidad de carga de hasta 60 kN por metro cuadrado.
Sistema de apoyo adecuado: en el método tradicional de la tecnología de encofrados de la construcción, los elementos de apoyo necesarios para elementos tales como suelo, plataforma, generalmente requieren encuadre completo con un mayor coste, mientras que las barras de soporte para la plantilla de aluminio son relativamente menores, por tanto, proporcionan mayor espacio de trabajo, acceso de personal y manejo de materiales, haciendo fácil la administración del trabajo.
Superficie del cemento después de desencofrar: la calidad de la superficie del hormigón es suave después de retirar el encofrado de aluminio y, básicamente, cumple con el requisito de hormigón terminado y expuesto. No hay necesidad de aplicar yeso, y por lo tanto ahorrar el coste de enlucido.
Todo son ventajas con el encofrado de aluminio, así que recuerda “keep calm and love Strong Forms”.
by Strong Forms – Sistemas de Encofrados de aluminio.
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